Vistas de página en total

jueves, 27 de abril de 2017

Enero

Estoy de madrugada, escribiendo con dudas en la mano y ojeras malva en los ojos, explosiones en el corazón y mil y una lagrimas que no he derramado aun,  Y están ahí, llamando en mis parpados, diciendo aquí estamos ábrenos que te haremos sentir mejor...Engañando a mi estomago, yo solo tengo mi verdad, yo solo tengo horas de sueño acumulado en mis hombros...

Las espinas que yagan mi corazón, los recuerdos que las clavan con martillo y con el cincel graban pensamientos que atormentan el deseo, que drogan la conciencia, que se transfieren a mis manos para plasmarlas en cada una de estas teclas...

He tropezado a cada paso, he fallado en cada intento, he conseguido no conseguir nada, he dejado de hacer...

"Ella tenia miedo equivocarse, yo tenia ganas de equivocarme una vez mas... Ella no creía en los finales felices, yo colecciono cicatrices...". Ella era una terrible bendición venido del cielo, yo un maravilloso error ocultado a los demás...

Yo solo quiero huir de mi cuerpo, escapar al destino, arrancarme los vestigios de lo que alguna vez fue este que te teclea, quiero navegar al mar, cruzar las olas y que me traguen para poder beber de mi propio naufragio.

Papeles rasgados, iluminados por los albores de algo bueno, impregnados de tinta negra, como la sombra que acecha detrás de mi... como las notas del réquiem que suena en mi cabeza.


Que todo o nada se queda aquí demostrándose por si mismo...

Gracias por leerme,

Mario