Once/Quince, nosotros nacimos, nos juntamos en una disyuntiva eterna, destinados a respirar el mismo aire juntos, a navegar en el mar que es la vida, a bajar la marea a sobrepasar las olas y dejar atrás la intemperie y vivir en tranquilidad.
Dormir pasando rápidas las horas para llegar a la vida, a mi sueño constante, vibrar con cada momento. Frotarme los ojos para ver si se difuminan los bordes, para ver si hay algo que no entienda, algo que me indique que es un sueño muy muy real.
He dicho muchas veces que no me acuerdo de los sueños pero ya se por qué es y es porque estar a tu lado es un constante sueño, maravilloso e increíble, la fortuna que tuve al encontrarte es la misma que la que tengo al poder besarte.
Hay una luz que ilumina mi camino al andar, ilumina cada paso, irradia felicidad y amor, con sus destellos me acaricia, me besa, me habla y me hace reír, con su energía consigue que se me pasen todos los males, jamás se apaga, jamás se separa de mi. Esa luz, tiene nombre y apellidos, de hecho esta a mi lado por que tuve la suerte de estar predestinado a ella, y a ella le doy gracias por ser correspondido, tu eres esa luz, si tú Adriana.
Hoy camino recto, no miro hacia atrás, yo quiero a mi lado a mi vida, a esa que me hace despertarme por las mañanas, la que me da fuerzas, la que me da la vida, la que me conquista con cada palabra que me lanza, con cada sonrisa que me enseña, con cada mirada que me clava, con cada beso que me planta, con cada abrazo que me reconforta, con cada acaricia que me eriza la piel, con cada segundo a su lado que me roba el corazón, con cada movimiento hacia mi se pega mas a mi alma, con cada latido de mi corazón que deletrea su nombre, con cada día que pasa mas enamorado estoy.
No quiero morir sin ti, dame al menos una noche mas contigo y vivir en nuestra eterna locura, a tu lado no se mas que sonreir. Te amo y jamas me separaré de esos ojos que me tienen loco.
Gracias por leerme,
Mario
Fdo: un bizco enamorado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario