17280 minutos alegría intensa que hace latir mis sentimientos en verso, alientos que se acercan a nuestros corazones para dar energía, esa energía que mueven nuestros músculos de la boca, para mover todo el mecanismo necesario para enamorarnos, enamorado como lo estoy yo.
Un panda alocado alegró mi vida, enseñándome que yo tambien me merezco romanticismo, que yo tambien me merezco sorpresas, que yo tambien me merezco lo mejor de este mundo, tú.
144 Horas deseando que pasasen rápido, llenando a medias un vaso donde la otra mitad son esas miradas que nos echamos, de tan solo 1 segundo donde nos miramos, nos besamos, nos acariciamos todos y cada uno rincones de nuestro cuerpo, nos decimos te quiero e inspiramos para la siguiente ronda.
Un panda agresivo alegró mi vida, respiré alegría con tus labios observando mi respiración que se aceleraba que invocaba nerviosismo y los labios secos llaman a las ganas de besar, eses que excitan , acentos que enamoran, versos de días soleados que impresionan en mi ojos tu imagen grabada en mi mente donde mis defensas solo piensan en protegerte y mi mente en sorprenderte, como una melodía alocada y rápida de besos a escondidas nos atrapa, nos lleva y nos hace sentir esto.
604.800.000 mili segundos y tan solo pensando en hacerte feliz, pensando sucio, pensando solo en esa curva que me vuelve loco, pensando en lo suave de esos labios, en el idioma que me habla tu mirada, en esas gritar a todo el mundo que te quiero.
Un panda agresivo alegró mi vida y un chico del norte que se marcha de tu lado nunca, en ningún lugar, bajo ninguna circunstancia...
Y sino.... MAS UNO!
Gracias por leerme,
Mario.
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