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viernes, 23 de mayo de 2014

Bella y Bestia 2.0, parte 5

Staind se oía a todo volumen, las enloquecían en sus cascos. "Si, señor, me corro"- pensó. Se le puso la piel de gallina, el pelo erizado y un escalofrió por la espalda.¿ Realmente es por la música o porque de repente su cabeza no tuvo mas que ponerse a recordar a aquella chica de la playa?. Mientras caminaba de vuelta a casa, no paraba de pensar en donde había visto aquel rostro anteriormente. "En mi calle seguro"- dijo en voz baja, justo pasaba una señora y esta se quedo alucinada pero cuando se quiso dar cuenta ya no importaba. Llegaría a casa y se pondría a buscar en Internet. Empezó a correr por segunda vez en su vida. Y otra vez el motivo no era él.

"Lo he pasado genial" -dijo con una sonrisa inquebrantable en la boca. No había nada que pudiese romper ese momento de despedida entre el y esa chica que ya no era tan desconocida. Cerró la puerta y se fue al salón sin mirar por donde iba y por supuesto nada preparado para lo que iba a ocurrir a continuación.
Bueno casi nada, de repente le empezó a sonar el móvil. "VIDA MIA" ponía en la pantalla, rápidamente contesto como si de un acto reflejo se tratase. Un escalofrió frió le había recorrido todo el cuerpo de arriba, abajo. Tras horas de conversación dando vueltas a lo mismo, la falta de confianza por parte de ella sobre el, decidieron darse un tiempo. Como es lógico en una persona normal y enamorada, le dio el bajón típico pero nada mas recibir un mensaje de ella diciendo- "Espero que nuestra relación sea como la historia interminable :P". Eso le hizo olvidarse de todo y a la vez darse cuenta de muchas cosas. De la realidad el no la quería.

¿Sabéis esa chica que anda feliz y que es tan guapa que la gente se gira simplemente por si se vuelve para mirarla a la cara?. Esa era ella, ojos verdes, pelo moreno y una sonrisa permanente con un toque inocente.
Caminaba feliz, seguía pensando en ese chico "perfecto", ese príncipe azul que no tenia ningún defecto, esa persona que la hacia perder el sentido del tiempo y del espacio. Solo era capaz de darse cuenta de lo que sentía. Tenia el corazón a mil, solo tenia ganas de salir corriendo y volver atrás. No hacia mas que construir castillos en el aire sobre como ibas a ser su futuro, no hacia mas que pensar sobre dejar de pensar. Algo difícil ahora mismo para ella.
Llegó a casa exhausta, caminó hasta el salón, encendió el Skype y empezó a hablar con su amiga del chico que había conocido en el gimnasio. No paraba de hablar, su amiga solo era capaz de reír y mirar como su amiga se había enamorado a primera vista. Estaba radiante y feliz, después de mucho tiempo, era absolutamente feliz y todo daba igual.

Pero todo no es oro lo que reluce y hasta aquí acabaría su felicidad. Ella pidió el tiempo y ahora decidiría si quería volver, pero pronto se dará cuenta de que la otra persona tiene pensamientos propios y sentimientos. Eso puede ser un gran problema para tus planes de futuro obviando el hecho de que el chico de enfrente, esta en todos lados.


Gracias por leerme,

Mario.

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